Un entrenador de un deporte cualquiera y en particular en el fútbol, debe tener primero una buena preparación profesional en una escuela y segundo debe tener agudeza mental de manera de poder seleccionar a sus jugadores con el perfil necesario para desarrollar el fútbol que desea en un partido; para determinar que cambios de táctica debe hacer durante el mismo; y los cambios de jugadores y las instancias en que debe hacerlo, para adecuar el desarrollo de su fútbol en función a las necesidades del momento.
Este equipo peruano, si bien tuvo algunos buenos jugadores individualmente hablando, sólo se observó un juego de conjunto y una actitud diferente durante los últimos minutos del encuentro que se jugó contra el seleccionado paraguayo. Se perdió sólo 1-0, pero Perú jugó para perder por 4 goles de diferencia o más.
El equipo fue bastante medroso durante todo el encuentro, con falta de juego de conjunto tanto en defensa como en ataque. Hubo falta de precisión en los pases por falta de movilidad de los posibles receptores y que el equipo paraguayo impidió por la actitud agresiva en función de marca.
En el mano a mano que se presentó durante el partido en función de ataque, contrariamente a lo que sucedió en defensa, casi siempre perdimos por falta aparente de entrenamiento, por lo que los tres jugadores en ofensiva no tuvieron la personalidad necesaria y no fueron lo suficientemente explosivos en posesión de la pelota para desequilibrar; además como ya se mencionó, la falta de juego de conjunto y falta de apoyo del medio campo, generó que el ataque se diluyera y terminara la pelota en posesión del contrario.
Hay que comentar en particular, el desenvolvimiento del jugador de Cristal, Christopher Olivares, que prácticamente deambuló en el campo, contrastándose su rendimiento con el que desarrolla en el torneo nacional, por lo que habría que analizar el porqué de ello, de manera de recuperarlo.
La defensa y el arquero en especial, tuvieron un alto rendimiento, pero todos los jugadores, es decir LOS ONCE, deben comprometerse no solo en defender sino en atacar, de manera de ser un solo puño en estas dos funciones durante todo el partido.
El ingreso de estos tres jugadores al final del partido, Oslim Mora, Sebastián Gonzales y Gerald Távara, cambiaron la personalidad del equipo de forma importante con los que el equipo se defendió y atacó de forma ordenada, generándose oportunidades de gol, tanto desde media distancia como en profundidad, más en esos minutos finales que durante todo el partido.
Perú le ganó a Uruguay 1-0 pero creo que también pudo perder, por ello también, queda al análisis el trabajo que ha hecho el señor Daniel Ahmed con nuestra selección Sub-20 durante todo este tiempo y que particularmente critico, más aún sabiendo que hay entrenadores peruanos con mayor capacidad.
